en La encantadora Isla de las Golondrinas ha sido el escenario de hechos históricos que la han marcado, haciendo de ella una isla exótica, como salida de un cuento. Ella ha dado cobijo a los mayas, españoles y hasta piratas temerarios. A pesar de esto, siempre ha sido una isla pacífica y sus habitantes parecen estar embelesados por un amor y respeto a la cultura maya como en pocos lugares. A continuación algunos datos de Cozumel que quizás no conocías.
La Diosa Ixchel
Los primeros habitantes de Cozumel fueron los mayas, quienes rendían culto a la diosa Ixchel, deidad de la fertilidad, del parto, del amor y de la gestación. El amor del pueblo maya a la diosa Ixchel fue tal, que se le construyó un santuario y era deber de toda mujer ir al menos una vez en su vida a rendirle culto. Se cuenta que la diosa Ixchel en agradecimiento les hizo traer del cielo los pájaros preferidos de los mayas, de ahí el nombre de La Isla de las Golondrinas. En maya Cuzam es golondrina y Luum, lugar, dando origen al nombre de Cuzamil. Los españoles al no poderlo pronunciar con exactitud, comenzaron a deformar lo por Cozumel.
La Conquista Española
La noticia de que Cozumel se había convertido en un puerto marítimo en donde se intercambiaban mercancías, llamó la atención de los invasores españoles y es así como en 1518 Juan Grijalva llega en barco a Cozumel el 6 de mayo de 1518. Para marcar el evento, el mismo día se oficia la primera misa católica registrada en territorio mexicano. Un año más tarde, en 1519, Hernán Cortés pisa por primera vez territorio mexicano en la Isla de Cozumel. Bastaron un par de años para que en 1924 conquistara por completo el territorio de Yucatán.
Los Piratas del Caribe
Aunque algunos lleguen a pensar que los piratas fueron mera fantasía, muchas veces la realidad supera la ficción y la historia nos prueba que la hoy pacífica Isla Cozumel, fue utilizada como guarida por uno de los piratas más temibles de su época: Henry Morgan. Se cuenta que fueron las cuevas lo que más atrajo a este despiadado pirata inglés, ya que en ellas escondía sus tesoros. Su estancia en esta isla fue breve pero aún así se le recuerda con una pequeña estatua.
La Fama Mundial
Alrededor de los años 60’s el reconocido cineasta, buzo, oceanógrafo y escritor Jacques Cousteau tras haber explorado los mares a lo largo y ancho del mundo a bordo de su barco Calypso, declaró que Cozumel era el mejor lugar para bucear y , como arte de magia, todos los amantes del buceo fijaron su mirada en este pequeña isla convirtiéndola en uno de los mejores lugares para la práctica de este deporte. Los cozumeleños en agradecimiento a Jacques Cousteau han puesto una estatua de él en el fondo del mar.
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